miércoles, 14 de noviembre de 2012

Un Día en la Sierra (Craig Moxley)

"Fui a los bosques porque quería vivir deliberadamente; enfrentar solo los hechos de la vida y ver si podía aprender lo que ella tenía que enseñar. Quise vivir profundamente y desechar todo aquello que no fuera vida...para no darme cuenta, en el momento de morir, que no había vivido" Henry David Thoreau

El día empezó temprano, con un café caliente y pan tostado. Estuve emocionado porque en este día me voy a la Sierra. Después de un corto y barato viaje en tren, llegué en Cercedila. Es totalmente loco como fácil lo es a viajar a Cercedilla de Madrid usando solo transporte publico. Situando entre las montañas, es un diferente mundo—totalmente tranquila—y solo una hora y media de Madrid.
           

Vinesh y Mellisa han perdido su tren, pues tuve un poco tiempo a explorar la ciudad y buscar por la entrada a los caminos. Cercedilla tiene un sentido como un pueblo montaña donde necesitas estar con un chimenea y buen libro después de un grande día caminando.

 

En la distancia, pude ver nieve en las montañas. Comí mi almuerzo aqui y en breve ellos han llegado. Empezamos a caminar y explorar el bosque. Sentí muy alegre a estar allí entre los arboles que algunas de que estaban cambiando sus hojas a bonitas amarillos. Dentro de poco, encontramos una calzada romana. Habíamos aprendido que la calzada es en la Sierra en nuestro clase de Historía de Arte. El hecho que este camino era construido de los romanos nos soprendió aun más de el hecho que hemos llegado aqui en menos de dos horas en transporte publico. Durante el tiempo de los romanos, este camino era a Segovia. Yo no lo podía creer.


 En el fin de el día, cuando estabamos regresando a la entrada del camino, decidimos a dejar el camino y subir un cerro por una vista de la cuidad. Aquí, encontramos algo muy, muy raro. Primero, fue muchos tipis. No pensamos mucho sobre este. Pero, entonces vimos la cabeza de una vaca por encima de un tronco. También, fue ramitas en la forma de una estrella. Cerca de la cabeza de la vaca, vimos los suministros de la persona que está construyendo los tipis. Vinesh dijo que había una subida en vudú en España. Yo no sé....

 




Pero, fue vale la pena, porque la panorama por encima de el cerro fue totalmente fantastico. Podemos ver por milas y milas y milas (¿hay fans de Bon Iver aquí??).

Poco después de este, regresamos a Cercedilla. Tomamos un café y entonces, antes de lo supimos, estuvimos en Madrid con todos de las alegrías.. y penas de la vida urbana.

9 comentarios:

  1. Esta excursión de un día se ve increíble. Vivir un estilo de vida urbano es sin duda una experiencia diferente de los cuadrantes verdes en Duke. Muchas veces, extraño los jardines de Duke o simplemente la posibilidad de jugar a la pelota afuera. Tengo un mayor aprecio por los espacios verdes y los árboles después de mi tiempo aquí y este viaje se parece a la escapada perfecta de la vida metropolitana de ritmo rápido.

    -Courtney

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  2. Parece que esta excursión fue hermosa. Y entiendo perfectamente cuán necesario es tener un break de todo el ajetreo de la ciudad. Y, me interesa mucho lo que encontraron sobre el vudú y los tipis, sobretodo luego de leer el post de melissa en el que describía esto.

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  3. Desde yo llegué en Madrid quería ir a las montañas. Muchas veces echo de menos los espacios verdes de Duke y mi casa en los suburbios. Es increíble que tan cercana a la ciudad bulliciosa de Madrid hay naturaleza hermosa como tu encontraste en Cercedila. Creo que es importante tomar tiempo para ir al mundo natural y olvidar de los preocupaciones de la vida material. Todos necesitan un descanso para recordar lo que es verdaderamente importante.
    -Stephanie Tsimis

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  4. Ahora espero que hubiera ido contigo a las montañas… Tenía dudas sobre tu viaje porque creía que ya ha nevada allí. Tu viaje me recuerde a mi hogar en Colorado. En las montañas allí, siempre se puede encontrar tipis al azar y, si tienes suerte, el cráneo de una vaca o los cuernos de un alce. Me alegre que tu viaje pasó con buen tiempo y con fantasmas simpáticas.

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  5. Todavía no puedo creer que divertido era nuestra excursión. Quien sabía que era un sitio de naturaleza tan rica tan cerca de Madrid? Para mi, la experiencia fue increiblamente divertido y saque unos fotos preciosos. Tambien, me encanta que hicimos todo por menos de 15 euro. El noche anterior, fui a Joy Esclava y pague 15 euro para entrar- y fue terible. Salí temprano y creí que me había tirado mi dinero en la basura. Cuando fui a Cercadilla el proximo dia, sentí mucho mejor y sabía que absolutamente vale la (poca) pena!

    Vinesh

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  6. Qué bonito! Me gustaría mucho ir allí.... No puedo creer que era un camino romano a Segovia! Como el mundo ha cambiado...

    Me da pena que nunca fui a una de estas cierras en las afueras de Madrid, porque me gusta mucho estar afuera (no soy mucho de ciudades, aunque me gusta estar en Madrid por la facilidad de viajar gracias al transporte público). Por cierto, leer todas las entradas del Blog me pone un poco triste porque tengo que pensar en todo que no hice en Madrid. Hay tantas oportunidades en la ciudad y otras tan cercas que es dificil encontrar tiempo para hacer todo, pero me emociono igual porque ahora tengo razones para volver!

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  7. Craig, obviamente tu post ha generado emociones y reacciones de muchos de nosotros, teniendo en cuenta el hecho de que mi comentario es uno de los 7, y no me da sorpresa que este es el caso: creo que tú has hecho lo que muchos de nosotros no hemos experimentado: la soledad sencilla que Cercedilla puede ofrecer. Estoy impresionado por su voluntad de romper con el grupo y probar algo nuevo, por visitar una ciudad que ni siquiera había oído de antes de leer este post, y por su referencia a las sabias palabras de Henry David Thoreau. Y por lo tanto, para reciprocar, ofrezco una cuota por David Hume: 'Belleza en las cosas existe en la mente que les contempla'. Gracias por compartir sus contemplaciones y por lo tanto, transitoriamente, la belleza de la Sierra.

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  8. Craig-

    Aunque 7 personas ya han comentado sobre tu bitácora, después de leer su primer párrafo de mi cita favorita de Henry David Thoreau, yo sentía como era necesario que yo también hiciera comentario. Yo vivo muy cerca del hogar de Thoreau, Walden Pond, en Concord, Massachusetts. Cada estación del año, mi familia hace un camino alrededor del estanque para conectar con la naturaleza como hizo Thoreau hace muchos años. En el otoño, observamos los colores rojos y naranjos de los arboles, el invierno jugamos en la nieve, en la primavera observamos los flores empezando a abrirse, y en el verano nadamos en el estanque. Esa experiencia increíble me parece como tu experiencia en la Sierra.

    -Alexandra Young

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