martes, 11 de diciembre de 2012

Cómo he aprendido a hablar España

J.P. Senter
El 11 de diciembre


            ¿Regresaré a los Estados Unidos completamente bilingüe aunque mis padres quieren creerlo? Yo diría que no. No creo que nadie pueda regresar así porque ser bilingüe requiere años y años sumergido en la cultura, fácilmente saltando entre lo más coloquial y lo más culto del idioma. ¿He mejorado? Sin duda. Aunque me habría gustado mejorar más, creo que todos nosotros podemos regresar a nuestros hogares sabiendo que hemos aprendido más que un lenguaje concreto, pero el dialecto cultural de un país también.  Más que el castellano, hemos aprendido a hablar España.

Mapa de España
            Cuando vine a España el 29 de agosto, no sabía cómo comportarme en la mesa ni lo que significaba “menú del día” ni las rutinas diarias de un español.  No sabía cómo leer el lenguaje complicado del metro y las calles ni cómo pagar con euros ni cómo ir a un café para chocolate y churros.  Sin embargo, a lo largo de mi estancia en Madrid he ido aprendiendo todo este lenguaje cultural además de ese idioma que lo da vida.  Creo que todos nosotros sabemos ahora cómo funciona una clase española y la manera única en que los estudiantes españoles se visten.  Además de las canciones de Real Madrid y Atlético, hemos aprendido a bailar el flamenco en Andalucía, las muñeiras en Galicia y la sardana en Barcelona.  Ahora el sabor de tortilla, patatas bravas y paella es parte de nuestro cuerpo para siempre. 

Vista de Madrid desde El Escorial
            Sobre todo, es sumamente importante que nos hayamos podido acercar a esta cultura mediante nuestro programa porque, con este entendimiento de España, podemos estar más sensibles a lo que pasa aquí.  Los cinco viajes enriquecieron nuestro entendimiento porque, sin la posibilidad de comparar Andalucía con Galicia geográficamente, Galicia con Barcelona lingüísticamente o Segovia con Toledo históricamente, no nos fuera posible hablar el lenguaje cultural de España.  Nuestra lección antropológica sobre España ha sido clave para comprender la actualidad y para que, cuando me marcho el 13 de diciembre, pueda aplicar en los Estados Unidos los conceptos que he aprendido acerca de la sensibilidad cultural.  

1 comentario:

  1. Me gustó mucho su blog, Jota Pe. Estoy de acuerdo que hemos aprendido otro idioma más cultural del español completamente teórico. Me llamó más mi atención lo que has dicho sobre la comparación lingüística entre Galicia y Barcelona. Para mí, fue fascinante observar las diferencias sutiles entre los idiomas de las distintas comunidades. Tengo muchas (casi demasiadas) fotos de señales en esos dos lugares que dicen cosas como "Xocolata amb Xurros", porque todas me interesaban muchísimo. Claro, podemos entender que un sitio con este señal está vendiendo chocolate y churros, pero ha sido muy interesante para mí aprender y observar estas diferencias. En el pasado, solo había pensado que habían equivocado con un señal escrito así. Pero ahora entiendo :) (Emily Marso)

    ResponderEliminar