lunes, 10 de diciembre de 2012

Expectativas contra Realidad por Stephanie Tsimis

 
Aquí estamos en nuestros últimos días en Madrid. A pesar de que la mayoría de nosotros estamos abrumados por los proyectos, ensayos, y exámenes finales, es importante no olvidar de recordar y reflejar en lo que ha sido un semestre maravilloso. Al final, las expectativas que yo tenía antes de llegar en España fueron muy distintos a realidad, pero en muchos casos en las mejores maneras posible. 
 
Las clases
            Yo imaginaba que la estructura de mis clases en España serían muy semejantes a las de Duke y para ser completamente honesta, pensaba que no tendría el mismo nivel de trabajo de Duke para nada. En realidad, las clases del programa no fueron la “broma” que los mitos sobre los estudios en el extranjero perpetúan y mis experiencias en CEU fueron muy distintos a mis experiencias en la universidad estadounidense. Pero, estas sorpresas han hecho mis experiencias académicas en España mucho más gratificantes de lo que esperaba.
            Primero, he descubierto nuevas pasiones académicas. Antes de venir aquí, no sabía nada de la arquitectura ni de la historia del arte. Ahora, yo puedo disfrutar de los cuadros en los museos y los edificios en ciudades nuevas en una manera mucho más profunda que antes. Además, he aprendido que la publicidad es algo que quiero perseguir quizás como una carrera.
            Finalmente, durante el semestre, aprendí muchísima sobre las diferencias entre el sistema universitaria de España con respeto a lo de los Estados Unidos. Desde mis experiencias personales, los profesores españoles toman un papel más fuerte en el aula. Tienen expectaciones muy claros sobre cómo sus estudiantes deben actuar en clase que no existe en Duke, al menos en mi experiencia. Mis experiencias en CEU me ha hecho apreciar una gran cantidad de cosas nuevas sobre Duke y también me abrieron los ojos al hecho de que no todas las universidades se acercan a la educación de la misma manera que hacemos. 
 
Los viajes
            Antes de llegar en Madrid, pensaba que me gustaría visitar nuevos lugares en España y Europa, pero no esperaba el efecto enorme que las cosas que he aprendido sobre nuevas culturas y sus hábitos y historias han tenido en mi perspectiva del mundo. Sobre todo, me encantaba descubrir España afuera de Madrid. Era una sorpresa alucinante de ver los distintos paisajes, comida, lengua, cultura, e historia de cada región que hemos visto. Pensaba que la mayoría de España era más o menos lo mismo y no sabía que todas las partes del país tienen distintas personalidades. 


 Segovia
  Santiago de Compostela 
Cuenca


La ciudad
            Cuando llegué por primera vez en Madrid no estaba segura si la ciudad se convertiría en mi casa. La ciudad parecía demasiado ocupada y frenética para ser un lugar que yo podría llamar mi hogar. Sin embargo, a lo largo de las semanas me enamoré con la vivacidad de la ciudad y sus joyas culturales e históricas. Aprendí a abrazar (al menos a veces) la vida nocturna que dura hasta la mañana.  He explorado muchos de los barrios diferentes desde Chueca, Malasaña, Letras, y Retiro a Salamanca y Ciudad Universitaria. He identificado mis cafés, restaurantes, calles, y bares favoritos. Ahora, no quiero irme de una ciudad que todavía tiene muchos tesoros que no he encontrado. 
 El Palacio de Cibeles
 La Latina
 
Los españoles
            Mis estereotipos sobre cómo serían los españoles quizás hayan sido mis expectativas más incorrectas. Admito que tenía imágenes de gente apasionadas que tendrían el mismo entusiasmo por su país que tienen por la tauromaquia y por sus familias. Obviamente, estos estereotipos eran generalizaciones ignorantes. Si, los españoles son apasionados pero cada persona por sus propias coasas. Me encantan la mayoría de las personas que he conocido durante mi tiempo en España incluyendo mis profesores, el personal de Duke en Madrid, mis compañeros de clase, los guías de los viajes, y por supuesto mi madre madrileño fantástica y todas las personas en su vida que yo les conocí.

He hecho algunas de las memorias mejores de mi vida este semestre y me pone muy triste de salir. Espero que pueda regresar a Madrid en el futuro y sea recordada de todos los tiempos inolvidables que tenía aquí.

             
Adios, Madrid. Te echaré de menos.





1 comentario:

  1. Yo disfrutaba los viajes con DIM mucho también. Me sorprendió que diversa es España, tanto en los idiomas como la paisaje. Estaba muy emocionando a viajar por Europa, pero nunca pensaba mucho en los viajes por España. Estoy alegro que tuvimos la oportunidad a ver más de España, porque no lo hubiera hecho por mi propia cuenta

    Alec Higgins

    ResponderEliminar